Gabriel Castillo-Herrera

Calderón se enfrenta a su primer revés en el extranjero, ya como presidente, en su primera gira por Europa: fue suspendido “por motivos de seguridad” un encuentro con empresarios alemanes en virtud de que algunas organizaciones convocaron a una manifestación frente a la Casa de la Economía, en Berlín, bajo el lema “Fin de la Represión en México”.

El acto de protesta fue organizado por la Federación Anarquista de Berlín y por Atenco Resiste.

Según fuentes dignas de confianza, parece ser que Eduardo Medina Mora ofreció a las autoridades alemanas los oficios de la AFI y de la PFP para contrarrestar las fuerzas de los manifestantes: “No toleraremos que le echen mentadas y rechiflas a nuestro primer mandatario en suelo extranjero. Si las autoridades berlinesas no pueden contener la violencia, nosotros sí”. Calderón avaló la declaración afirmando que tampoco tolerará (ya ven que es su expresión favorita) que le “hagan violines” ni “trompitas de elefantitos” con los dedos. Agregó que está seguro que tal desacato está organizado por los acaparadores del maíz, por los narcos y por López Obrador.

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